Revisando frenos delanteros y traseros
En esta oportunidad vamos a ver cómo podemos revisar y o reparar los frenos de nuestra Kombi. Se trata de una Kombi Alemana de los 70 pero podría ser cualquier otro modelo que tenga freno a discos como es este caso.
Lo primero que tenemos que hacer es aflojar nuestras ruedas, levantar nuestra Kombi, y asegurarla con trípode es que apoyen en la carrocería o la cañonera. Comenzamos por remontar las mordazas de los frenos delanteros.
Debemos revisar las mordazas y sus pistones, y ver que no haya óxido que los trabe, en ese caso debemos sacarlos pulirlos o cambiarlo, también tenemos que cambiar las empaquetaduras y los guardapolvos. Para lograr sacar los pistones debemos abrir la mordaza al medio con sus tornillos de sujeción. Es importante no perder los orring internos que sellan los conductos de paso.
También debemos chequear el espesor de nuestros discos se están rayados y aún tienen pared se pueden rectificar, para eso debemos mandarlos a los talleres o comercios dedicados a frenos que rectifican campanas y discos, si por el contrario el disco todavía está bien podemos seguir usándolo y si no, lo podemos reemplazar por uno nuevo.
Muchas veces cuando compramos nuestros discos a pesar de ser nuevos vienen un poco oxidados porque muchas veces están demasiado tiempo en el depósito esperando que alguien los compre, esto se debe a que son vehículos discontinuados. En ese caso podemos usarlos igual porque luego se seguirán oxidando y ensuciando como se puede ver en el disco de la derecha que es el que vamos a reemplazar. En la superficie de apoyo de las pastillas el brillo no tardará en volver ya que las pastillas se sujetan a esta superficie con gran presión creando una gran fricción.
Es importante al trabajar con nuestra Kombi tener el trípode de anclaje de seguridad bien apoyado, nunca se metan debajo de una Kombi que sólo tiene el criqué hidráulico como sustento, porque puede perder su presión y la Kombi caer rápidamente sobre nuestras cabezas, la mayoría de las veces que sucede esto no nos da tiempo a salir corriendo y nos cae de forma violenta sobre nuestro cuerpo muchas veces perdiendo la vida, es por eso que debemos tomar las precauciones antes de quitar ruedas y elementos de suspensión y frenos y meternos debajo del vehículo.
También debemos revisar los flexibles hidráulicos, cada una de las ruedas tiene un flexible de goma enmallado en tela que se reseca y suele cortarse, en este caso podríamos perder nuestra capacidad de frenado en un momento inesperado, por eso aunque no pierda líquido hidráulico si lo vemos rajado o resecó debemos cambiarlo, en esto nos jugamos la vida.
Una vez que tenemos los mordazas limpias y restauradas a nuevo procedemos a colocar las y a apretarlas con un buen torque, ya que esos Bulónes de sujeción soportan todo el peso de la Kombi en el momento del frenado.
Debemos poner pastillas nuevas sobre todo si cambiamos los discos nuevos, es importante colocar pastillas blandas para que no silben los frenos al calentar, en esta misma sección de tren delantero explicó en otro artículo cómo evitar ese silbido en nuestros frenos.
Como se puede ver en la foto anterior y en esta imagen nuestras pastillas tienen un corte en el centro que permiten la salida de gases producidos por la alta temperatura, esta ranura es un escape para dichos gases y evita que nuestras pastillas trabajen sobre una superficie contaminada, algunas pastillas de otras marcas no traen esta ranura y el fabricante nos explica que no es necesaria, pero si lo deseamos podemos hacerselas con una amoladora y un disco fino de corte, sólo tenemos que marcarla con una profundidad que no debe superar la 3/4 parte de la pasta destinada a la fricción.
Cuando tenemos los frenos delanteros atendidos y revisados nos pasamos a los frenos traseros, aflojamos la rueda, levantamos la Kombi, la apuntalamos con un trípode, sacamos la rueda, desenroscamos el tornillito que sostiene la campana, damos unos golpes no muy fuertes a la campana para que se desprenda en el frente de la misma, y una vez que la retiramos pasamos a revisar su superficie de fricción que no esté rayada y los elementos que accionan el frenado.
Verificamos que los cilindros no pierdan fluido, de ser así debemos reemplazar su empaquetada o reemplazar el cilindro completo si está picado y no soporta una reparación. También debemos revisar el sistema de palancas del freno de mano y la superficie de de los forros de las zapatas de freno en este caso podemos ver que están gastadas, esto también se repara en los comercios dedicados a frenos que realizan esta tarea, en algunos caso va remachado el forro en la Zapatas y en otros va pegado con una resina que se hornea.
Es importante tener en cuenta cómo van todas las piezas antes de desarmar todo el kit trasero, sobre todo si no se tiene experiencia en estos vehículos, la dificultad para quitar los resortes, las zapatas, las varillas, desenganchar el freno de mano y por último quitar el cilindro es de alta complejidad por lo tanto hay que armarse de paciencia y utilizar herramientas que nos permitan esta tarea. No debemos olvidar revisar el flexible de frenos que en este caso está más adentro sobre la suspensión.
Éstos elementos que se ven en la imagen son los regules para arrimar nuestras zapatas luego de terminar todo el trabajo, debemos sacarlas limpiarlas y pulirlas engrasandolas en el momento del armado, deben girar libres fácil y con un destornillador de pala del lado de atrás por un orificio que hay en el plato, debemos poder moverlas en ambos sentidos de giro.
También es importante lavar todos los elementos quitando la grasitud, el polvo y los residuos de cintas de freno, en este caso se utilizó soda cáustica pero bien podría haberse usado algún combustible y luego agua.
Una vez terminada la limpieza podemos ponerle algún tipo de protector antióxido y de esta forma evitar el deterioro en los años venideros.
Cuando volvamos a amar todo el sistema de freno invirtiendo el proceso, debemos regular el freno de mano y arrimar cintas o zapatas desde los regules que previamente limpiamos y engrasamos, para dicha regulación lo que hacemos se hace con la rueda puesta, giramos hasta que se bloquea en absoluto y aflojamos un octavo de vuelta, es decir regulamos hasta que el freno se bloquea y luego soltamos esto no tiene que ver con el purgado del sistema hidráulico, sería el ajuste de carácter mecánico, el freno de mano y el arrime de cintas trabajan en conjunto.
Luego de toda la tarea de limpieza y de armado con la calibración de los elementos debemos purgar el sistema hidráulico, para explicar cómo se purga al sistema hidráulico vamos a escribir otro artículo técnico.
Saludos Aníbal De Sandro